martes, 20 de mayo de 2014

Suculentas addiction!

- Doctor, tenemos un problema. Un precioso problema.
Y es que me declaro fan total e incondicional de las plantas crasas y/o suculentas! Ésta es mi última adquisición. Mide unos 12cm de diámetro y me encanta!

Antes de independizarme no había tenido ninguna planta propiamente mía a la que le hubiese prestado atención, pero ahora disfruto como una niña visitando viveros e invernaderos, eligiendo cual será el nuevo miembro de la familia jajajja.
Así que después de mi adicción a las orquídeas, actualmente contamos con 8 en casa, llega la adición a las plantas crasas, y entre una cosa y otra ya me he juntado con unas cuantas. 
Al igual que los cactus, las crasas también son plantas suculentas, y sus hojas se han convertido en reservorios de agua.  Son especies ideales para cultivar, muy decorativas y sobre todo fáciles de mantener.
En casaplanta tienen un artículo en el que os explican todo lo necesario para conocerlas un poco más. Yo os lo resumo y comento:
 
Para captar el máximo de humedad del suelo, generalmente sus raíces se extienden muy superficialmente, y como los cactus, mantienen los estomas cerrados de día, y los abren de noche para absorber el dióxido de carbono que se convertirá durante las horas de luz, gracias a la fotosíntesis, en los azúcares que necesita la planta para vivir.
Para cuidarlas es tan sencillo como tener en cuenta una serie de cosas:
  • La inmensa mayoría de las crasas toleran las temperaturas altas, no así el frío. La humedad y el exceso de agua en el suelo reduce la resistencia de las crasas al frío. Muchas de ellas precisan pasar un poquito de frío en invierno para florecer.Aunque proceden de zonas desérticas, se sentirán mucho mejor sino están a pleno sol en la mayoría de los casos. O al menos en las horas más duras del día en verano.
  • La tierra donde plantarlas debe ser pobre y porosa. Es muy importante que drene bien y no esté apelmazada. En viveros podrás encontrar tierra específica para cactus y plantas crasas, que contienen altas dosis de magnesio.
  • Hay que manipularlas con cuidado, ya que son muy frágiles y enseguida podrías partir las hojas. Hay que evitar que sufran "heridas" en sus hojas, ya que por ahí pueden colarse los hongos, yo es algo que observo cuando voy a comprar una planta de esta clase.
  • Algo curioso e interesante es que cada hoja de las plantas crasas puede dar lugar a una nueva planta. Según me comentaron en un vivero, debe dejarse la hoja en agua unos días hasta que le salgan unos "pelillos" o miniraices, para luego trasplantarla a tierra. Casualmente entre las hojas de esta planta que os enseño hoy, había unas pequeñas hojas redondas que rescaté y trasplanté. Seguramente en el viaje algunas hojas de otra planta se rompieron y fueron a parar a mi preciosa suculenta. Así que 2x1!! Ahora solo me toca ser paciente y ver qué sale de esas minihojas. Aquí están!
  • A las crasas les gusta vivir apretadas.
  • Regar con moderación! La mayoría de los problemas de estas plantas son por culpa del exceso de agua. De octubre a marzo no deberían regarse en absoluto, a lo sumo pulverizar con agua el sustrato; en abril y mayo bastaría con regarlas dos veces al mes, y en adelante, mientras haga calor, habría que darles agua una vez a la semana o cada 10 días, especialmente a las que viven en maceta. Antes de regar es fundamental comprobar que el sustrato esté seco.
     
Pon una planta en tu vida!

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